ADVIENTO PARA TODOSMc13,37.目をさましていなさい

『あなたがたに言うことは、すべての人に言うのだ。目をさましていなさい』。マルコ13、37。

この章のはじめに(13,4において)弟子たちは「わたしたちに言ってください。そのことは、いつ起こるのですか。ことがすべて終わるときのしるしは何ですか」と言う。

   弟子たちは「自分たちだけに、『秘密の教えのように』、世の終わりについて知らせてくださいと言う。

   しかし、イエスが言われようとしているのは別なことです。

   『あなた方(エリートみたいなグループで、他の人たちに対して排他的になりがちなあなたがた)だけに話ているのでもなければ、世の終わりの話をしているのでもありません。

    神の訪れは、いつでもどこでもあなた方、そしてどの人の生活の中でも、起こっているのです。

    主の日、主の訪れは、思いがけないとき、思いがけない出来事、思いがけない出会いを通して行われる。主が来られるのは世の終わりではなく、常に常にこられつつある。どの人でも目覚めていれば、自分のなかに主がおとずれていることに気がつく。仏教の言葉で言えば「自灯法灯」と言えるのでしょうか。

   ADVIENTO PARA TODOS Y TODAS. No para la espiritualidad de elite exclusivamente.

No para el movimiento cerrado y exclusivista que se considere a sí mismo discipulado de primera clase, acreedor a recibir una enseñanza esotérica.

“Lo que os digo a vosotros, lo digo a todo el mundo: Manteneos despiertos” (Mc 13, 37). Lo que dice es para todos y todas. Y pueden y deben descubrirlo todos y todas, a condición de despertar y espabilarse para percibir dentro de sí la venida, el adviento, la visita, el encuentro con El Que Vive.

No tiene lugar en un momento especial y mágico imaginado como el fin del mundo, sino en la cotidianidad del acontecimiento, el encuentro y el momento inesperados en que se hace patente la presencia siempre presente, siempre adviniendo a nuestra vida, del Misterio que nos sorprende.

Cuesta detectar esa presencia, porque las apariencias engañan y los momentos desconcertantes nos parecen situaciones de ausencia y silencio divinos.

Marcos apunta simbólicamente cuatro tiempos de esa llegada del Señor a nuestra vida: al atardecer-anochecer, a la media noche, al canto del gallo y a primera ahora de la mañana.

Son cuatro momentos, en la narración de la Pasión, en que Jesús se queda solo ante la traición humana y el silencio divino, como reflejan los cuatro pasajes siguientes del evangelio según Marcos.

14, 17-18: uno de los suyos en traicionará al anochecer, y los más íntimos se habían dormido mientras él sufría previendo lo que se le venía encima.

14, 60-62: el acusado Jesús, a media noche, padece el interrogatorio del sumo jerarca de la institución religiosa.

14, 30 y 14, 72: a la hora del canto del gallo le traiciona el cabeza de sus discípulos.

15, 1: a primera hora de la mañana le llevaban como a un terrorista acusado ante las autoridades para juzgarlo y condenarlo.

Cuatro advientos de la Presencia Absoluta en medio de la absoluta contradicción.