昇天は没入…Ascension means immersion... Ascensión es expansión/inmersión


Japanese:

エスの昇天を語るためには最も重要な聖書箇所はエペソ書4,10です:「すべてをみたすため」(ギリシャ語で、ina pleróse ta pánta)。

English:

Ascension into heaven means immersion in life. The main text of the New Testament to talk about the Ascension of Christ is Eph 4,10: “He went up, above and beyond the heavens, to fill the whole universe with his presence” (In greek: ina pleróse ta pánta)..

Spanish:

Ascendió a los cielos...para llenarlo todo. No hay que esperar cuarenta días ni cincuenta. Muerte, Resurrección, Ascensión y Pentecostés... todo ocurre en el mismo momento, aunque las narraciones evangélicas lo alarguen en el tiempo.

Cinco lenguajes en torno al símbolo de la Ascensión:

1)Está arriba, Lenguaje simbólico apocalíptico de victoria, “elevación” o “exaltación” (Lc 24,51).

2) Está a la derecha, Lenguaje simbólico de juicio escatológico, “a la derecha del Padre”, desde allí vendrá a juzgar (Act 1,11).

3) Está delante, Lenguaje simbólico del encuentro con Él en la praxis cotidiana, en Galilea le encontrarán (Mc 16, 7).

4) Está al lado, Lenguaje simbólico de su presencia en la comunidad enviada en misión, todos los días hasta el final (Mt 28, 19-20)

5) Está en todo. Lenguaje simbólico místico-cósmico: está en todo, ascendió “paera llenarlo todo”.

Subir a los cielos es bajar a la vida. Tres enfoques de la Ascensión: lo mítico, lo místico y lo cotidiano. Habrá quien elija comentar el lenguaje mítico de la subida los cielos según Lucas (Hechos 1, 1-11; cf. Lc) en forma popularmente comprensible (“No os quedéis embobados mirando hacia arriba”). Habrá quien prefiera profundizar en estilo místico para fe adulta de la Carta a los Efesios (4, 10: “para llenarlo todo”). Y muchas comunidades de base se dejarán animar por lo cotidiano de Mateo (28, 16-20: “a vuestro lado cada día”, cf. Mc 16, 7: “Va por delante...en Galilea lo veréis).

Decir que “subió por entre nubes” es lenguaje mítico. Decir que “lo llena todo” es lenguaje místico. Según el evangelista Juan, resurrección, ascensión y entrega del Espíritu son un todo inseparable, que coincide con la muerte y la lanzada en el costado, de donde brota sangre y agua (Jn 19, 29-34)”. En eucaristía vivas y vividas por comunidades como la de Entrevías, enredadas en las redes del Pescador, celebrarán la Ascensión al Cielo como descenso a la vida. Para descender a lo frágil, apearse a lo marginado y “bajarse al pobre”, se centrarán en la Galilea cotidiana de Marcos (Mc 16, 7) o la presencia en el camino de la praxis, con Mateo: “Con vosotras y vosotros a diario hasta el fin de los siglos” (Mt 28, 20) y en el camino comunitario: “allí donde os reunís, dos o tres, en mi nombre (cf. Mt 18, 20).

Jesús no se subió a un helicóptero, como el camerlengo de Ángeles y demonios, para trepar a las nubes y dejarse caer en paracaídas. Ya había dicho “Os conviene que me vaya” (Jn 16,7), para regresar como Éspíritu. Por eso no había que retenerle en su presencia física (Jn 20,17), para dejar que quien “lo llena todo” (Ef 4, 10) nos inunde con la presencia impalpable del “Dios y Abba de todos y todas, que está sobre todos y todas, entre todos y todas, y en todos y todas” (Ef 4, 6).

El mensaje de la Ascensión es: “Dejó de verse, pero no se fue; es impalpable pero está presente; su presencia es elusiva, pero real”. Tan verdad es que está en nuestro interior como que estamos en el suyo: “Alma, buscarme has en tí, buscarte has en mí”.

Este mensaje evangélico dejó sus huellas en textos de otras culturas. Leemos en el Sutra del Loto: “He aquí que siempre habito entre vosotros, no he desaparecido, aunque usando estrategias salvíficas a veces me presento como extinguido y a veces como no extinguido. Si hay seres en otros lugares que suspiren por mí con reverencia, también habito entre ellos proclamando la excelencia del Dharma” (cap. 16).

Atisbamos la resonancia de la Ascensión en el telón de fondo de este Nirvana. El punto común es la presencia impalpable, la inmanencia elusiva de la Fuente de la Vida. Como dice el Sutra del Nirvana: “Aquí y ahora la Vida te vive... todo cuanto vive ha sido engendrado por el Así-Siempre-Presente”.